No está el panorama como para mencionar nada relacionado con índices bursátiles, y sin embargo hay una bolsa que se hace omnipresente en nuestras vidas a medida que se acerca el buen tiempo y la famosa operación bikini empieza a ser un recurrente tema de conversación: la bolsa del gimnasio.
Y con los días soleados se alargan los días y comenzamos a hacer más planes, por lo que la bolsa del gimnasio deja de ser un mero medio de transporte de objetos del trabajo al gimnasio o del gimnasio a casa.
Ahora es necesario llevar un buen neceser que nos permita estar monísimas cuando quedemos con amigos a tomar algo después del gimnasio.
Pero ¿qué metemos en la bolsa del gimnasio?
1.- Imprescindibles unas toallitas desmaquilladoras.
Mi último descubirmiento y uno de los productos eco más vendido en Estados Unidos son las toallitas YES TO CUCUMBERS a la venta en Sephora.
2.-Champú y acondicionador en formato mini.
Mis favoritos son las tallas de viaje del champú de aminoácidos y el acondicionador con olor a coco de Kiehl´s.
3.- Un mist o bruma corporal que refresque después de la ducha pero no engrase.
4.- Crema coloreada para obtener buena cara y reponer el agua perdida en el ejercicio.
Ya sabéis que mi favorita es DayWear de Estee lauder con SPF15 y color.
5.- Un producto multi-tarea: el mejor el Ultraglow.
Los polvos mágicos que te valen de maquillaje, colorete, sombra de ojos…
6.- Una máscara de pestañas natural.
Me gusta mucho la última de Arstor, con vitaminas para nutrir las pestañas pero que deja un aspecto muy natural.
7.- Un peine, horquillas, gomas, …
¿alguna idea más?