Sales de la ducha corriendo y te das cuenta que es tardísimo… te lavas los dientes, te maquillas mucho más rápido de lo que te gustaría, eliges deprisa un modelito, coges el abrigo y las llaves y sales corriendo…. al entrar en el ascensor te das cuenta que llevas el pelo tal y como lo recogiste para ducharte… «Pues no queda tan mal, la verdad», te dices.
Y no te falta razón. Está de moda ese recogido informal que la mayoría de las veces te haces cas sin mirarte en el espejo… esa coleta «retorcida» que te alivia cuando tienes calor o te molesta el pelo suelto en la oficina… ese moño que con la ayuda de un lápiz te haces mientras te aburres en una reunión…
La revista Elle, recoge (nunca mejor dicho…) una colección de moños informales que, además de ser comodísimos, te harán ir a la última.
A mi personalmente me encantan, me suele gustar ir perfectamente maquillada y vestida y darle un toque informal con uno de estos recogidos «despeinados», así que estoy felíz de que además estén a la última.