Por fín una crema para mujeres europeas

Las grandes firmas cosméticas se están dando cuenta de que personalizar por tipos de piel implica a menudo, diferenciar entre las pieles de las mujeres de distintos países y regiones.
Esto no obedece únicamente a las diferencias que hay en las pieles de las distintas razas sino a las diferencias en lo que a sus hábitos cosméticos se refiere.
Si las rutinas de un hombre y una mujer no tienen nada que ver, las de mujeres de continentes distintos tampoco se parecen mucho.

Lo hemos hablado muchas veces. Las rutinas asiáticas son muy distintas a las de una mujer norteamericana, por ejemplo. En EEUU no conciben una crema hidratante sin protección solar (algún gen debo tener yo de ese país, porque tampoco la concibo…) y mientras el 52% de las mujeres asiáticas no puede vivir sin el sérum, en Europa solo un 21% lo utiliza.
A las europeas no nos quitan el sueño las arrugas, aunque cuando las detectamos intentamos ponerles remedio y de la forma más simple posible.
Estee Lauder ha imaginado a la mujer europea como una mujer que trabaja, que se preocupa de los suyos, y que quiere seguir haciendo vida social y tener un aspecto inmejorable.
Y pensando en ella, ha creado Revitalizing SUPREME.

Podemos decir que es una crema anti-edad para las que no se quieren complicar la vida.
Se trata de una crema con una textura muy ligera, nada densa y que nutre la piel, la revitaliza y le da firmeza.
Después de probarla personalmente durante más de 3 semanas (únicamente por la noche, aunque es válida para el día también) lo que más me ha aportado es firmeza.

El packaging dorado está asociado a cremas para pieles maduras pero se trata de una crema para mujeres a partir de 30 ó 35 años hasta la edad que se quiera.
Se trata de una crema fácil y con resultados excelentes.
El precio son 85 euros (50 ml).