Hace tiempo que quería dedicarle un artículo a la mítica «botellita marrón», es decir, el famosísimo suero reparador de Esteé Lauder.
Se venden 3 unidades por minuto en el mundo, es decir, 4.464 unidades diarias… creo que eso lo dice todo.
Nació en 1982, cuando Esteé Lauder decidió innovar dentro del desconocido campo de la renovación celular (hoy tan de moda…) y apostó por un ingrediente hasta entonces desconocido, el ácido hialurónico.
Diez años después nace Advanced Night Repair, un suero que, utilizado por la noche, reparaba el daño de los agentes medioambientales en el corazón de las células.
En 2006 llega Advanced Night Repair Concentrate, una fórmula que promete reparar la piel expuesta a situaciones especiales de desgaste, en tan sólo 21 días.
Después de continúas investigaciones, evolucionó hasta lo que hoy es Advanced Night Repair Synchronized Recovery Complex.
Reformulado para luchar contra los daños solares, la contaminación y el estrés de nuestros días, sigue siendo el reparador por excelencia, el suero que toda mujer debería tener en su mesita de noche.
Se aplican cuatro o cinco gotas en la cara (excepto en el contorno de ojos, que para eso está Advanced Night Repair Eye Synchronized Complex) y se extiende bien.
En poco tiempo empiezas a notar la piel más luminosa, hidratada, firme y a medio plazo vas viendo disminuir los signos de cansancio y lineas de expresión.
Los resultados están requeteprobados y la fidelidad de las que lo utilizan es la mejor publicidad que puede tener un cosmético.
Así que está claro que todas deberíamos tener una botellita marón, ¿no creéis?
¿Lo habéis probado? ¿Qué opinión tenéis?