En los últimos años hay marcas que, no solo me han enamorado sino que han sido, además, la causa de muchos mensajes que me agradecían habérselas descubierto.
Pasó con Kiehl´s, allá por 2010, cuando descubrimos productos que funcionaban y muchas me confesasteis haberos hecho adictas. Hace un par de años comenzó a pasar lo mismo con Living Proof.
Con el reclamo de Jennifer Aniston como co-propietaria de la marca, comencé a probar productos con cierto escepticismo para pasar a descubrir productos que, no sólo cumplían lo que prometían, si no que me daban incluso más.
Anti-encrespamiento, volumen, restauración… nutrición, hidratación, limpieza… no puedo resumiros todas las ventajas que he encontrado en muchos de sus productos.
Hoy os hablo de uno de los mejores y que ocupa ya un puesto entre mis favoritos: DRY VOLUME BLAST, que por su nombre ya debéis imaginar para qué es 😉
Se trata de dar textura, volumen y cuerpo al pelo y sin dejarlo pegajoso ni rígido.
Se aplica en seco, de la raíz a las puntas y, como todos los productos de Living Proof, no lleva siliconas, aceites, sulfatos o parabenos.
¿Qué conseguimos? Pelo más texturizado, con volumen que no desaparece a las pocas horas, y sobre todo que no ensucia el pelo. Yo, estoy totalmente enamorada, y no debo de ser la única porque no hace más que recibir premios 😉
Tiene un precio de 29 euros y se puede comprar en la web de Living Proof.