El verano a mi siempre me deja cierta «inercia» … una vez que termina la paz, la calma, la ciudad vacía y la tranquilidad, a mi me queda cierta inercia antes de meterme en el frenesí de septiembre.
Pero también me deja inercia en algunas cosas como el maquillaje.
En verano nos atrevemos más, utilizamos colores más vivos, parece que todo vale… y eso me dura más o menos hasta octubre cuando las nuevas colecciones comienzan a apetecerme tanto que me dejo abducir definitivamente por los colores y propuestas otoñales.
Así que no os extrañe que durante estos meses mezcle y convivan en mis listas de deseos colores vivos con otros más cálidos que nos llevan al otoño.
Y estos colores conviven en las últimas sombras de ojos metálicas de Lancôme.
Como las que lanzó hace un par de años Bobbi Brwon que tanto me gustaron, son de larga duración y con formato lápiz, lo que permite llevarlas en el bolso para retoques… pero ¿a quién quiero engañar? Jamás me retoco… 😉
La idea es que son de fácil aplicación y rápidas de utilizar pero OJO, esto no es del todo cierto. Todo lo que sea de larga duración, implica una mayor fijación y ello, a su vez, implica que no puedes utilizarlas alegremente porque es más fácil rectificar. Así que las primeras veces, conviene no venirse arriba y aplicarlas con cuidado.
El precio son 30 euros.
