-Mami, ¿te bañas en la piscina conmigo?
– Sí, claro. Pero dame un minuto que me voy a desmaquilar…
– ¿Y por qué necesitas desmaquillarte?
Y así es como una beauty blogger empieza sin darse cuenta, a dar consejos de belleza a una niña de tan solo 9 años… 😉
Hace varios años que descubrí que una buena limpieza de la piel, es a veces, el mejor tratamiento para tenerla perfecta.
La prueba es que los días en los que tengo que acudir a algún evento sin maquillar (porque nos maquillen allí o por cualquier otro motivo) me esmero mucho más en limpiar la piel tanto por la mañana como por la noche, y creedme que se nota.
Cuando me he puesto extensiones de pestañas que, pese a que me encantan, dificultan un poco el desmaquillado de los ojos, también he notado lo contrario.
Pero además, en verano, la limpieza cobra más sentido aún porque la piel está más expuesta al sol, a los agentes externos (cloro, sal, polución) y debe estar mucho más limpia, primero para que los tratamientos sean capaces de penetrar y actuar mejor, y por otro, porque tomar el sol con la piel limpia o restos de maquillaje puede hacer que aparezcan manchas o imperfecciones, al estar la piel «más asfixiada».
Así que espero, a estas alturas del post, haberos convencido de que toca que prestar más atención aún, a la limpieza facial.
Desmaquillador de ojos Bi-Facil de Lancôme
Lo conozco desde siempre y tengo que admitir que es uno de los mejores.
Para mí, que maquillo bastante los ojos, no hay nada mejor que los bifásicos, y Bi-Facil de Lancôme es de los que sacan mejor nota.
Aunque le han salido competidores más baratos (como el de Sephora, el de Lola Make up o incluso aquel que me enamoró de Perfumerías Douglas), cuando tengo ocasión, lo compro.
Desmaquilla d euna sola pasada, lo que hace, por un lado que el ojo quede totalmente limpio y, por otro, que la piel de alrededor y las pestañas no sufran por tener que «frotarlos».
Ahora además Lancôme promete la misma eficacia, para todo el rostro a través de su nuevo lanzamiento:
Desmaquillador facial Bi-Facil Visage de Lancôme
Es un agua micelar que además es bifásica, por lo que añade un componente aceitoso que ayuda a limpiar mejor la piel.
La aplicación es una maravilla y no queda apenas sensación grasa en la piel (un poquito sí, no nos engañemos) por lo que a mi, al menos, me pide un tónico después.
Tónico Tonique Confort de Lancôme
Lo de utilizar tónico es cuestión de gustos.
Hay quienes no pueden vivir sin él y quienes no entienden para qué sirve.
Personalmente lo que hago es utilizarlo cuando me lo pide la piel. Hay temporadas en las que lo aplico todas las noches y meses en los que no lo utilizo, pero cuando quiero una limpieza a fondo, no me puede faltar.
Este de Lancôme es una maravilla para pieles secas y, aunque su precio es elevado, si os queréis dar un carpicho, merece la pena.
Miel en mousse de Lancôme
Pero i hay un lanzamiento que me ha llamado la atención es Miel en Mousse.
Se trata de otra limpiadora con textura 2 en 1 y que hace que la limpieza del rostro sea un verdadero placer sensorial.
Se deposita un poquito de producto en la mano y se aplica suavemente en la cara mientras ves como la textura va transformándose.
Se emulsiona con agua y se masajea formando una mousse que se retira con agua.
Como veis las opciones son muchas.
Mi recomendación sería utilizar el desmaquillador de ojos Bi-Facil y después, o bien la Miel en Mousse o Bi-Facil Visage y, si queréis después el tónico.
Precios:
Bi-Facil Yeux: 39 euros (125 ml)
Bi-Facil Visage: 39 euros
Miel en Mousse: 33 euros
Tonique Confort: 34 euros (200 ml)