Esta tarde me preguntaban en Twitter por mi post sobre la VFNO. Y aquí lo tenéis. Pero no busquéis en él el look que lucí, la ropa que llevé, el maquillaje que me puse o los recuerdos de una noche plasmados en mi cuenta de Instagram.
Y es que, este año decidí no ir a la VFNO.
Me gustaría contaros que el motivo fue un éxotico viaje o un compromiso profesional en la NY Fashion Week, pero realmente fueron otros.
Y es que, después de dos semanas que no han podido ser más intensas (impartí dos cursos en Escuela de Bloggers, superé la vuelta al cole, acabé dos proyectos, actualicé los blogs…) no me quedaban ni fuerzas ni ganas.
Después de ver que la «noche de la moda» se ha convertido año tras año, en locales abarrotados de gente a la caza de una muestra, en riadas de personas que se suben a tacones imposibles tratando de ser objetivo de la cámara de algún cool hunter, no me mereció la pena recorrer kilómetros en coche, intentar aparcar y robarle a mi noche dos horas más de sueño (que teniendo en cuenta que estoy durmiendo menos de 6 horas creo que no es demasiado privilegio…).
Me hubiera gustado, sin embargo ir a dar un abrazo a mis amigos de Kiehl´s, de ghd, de YSL, y muchísimos otros que amablemente me invitaron a sus magníficas fiestas. Pero prefiero hacerlo cualquier otro día del año donde podemos charlar más a gusto.
Sin embargo hubo una cita que casi me hace olvidar todo esto y que casi me hace coger el coche y plantarme en la joyería Perodri.
Y es que allí se presentaban dos joyas benéficas a favor de Juegaterapia. Una causa tan bonita que merecía pasarse por allí a pesar del esfuerzo, pero después pensé que podía ayudar más a esta noble causa escribiendo un post, que pasando por allí.
La joyería Perodri ha diseñado dos joyas para ayudar en la construcción del próximo Jardín en el Hospital 12 de Octubre de Madrid, dentro del proyecto «Un jardín para mi hospi» que intenta hacer más llevadera la dura experiencia de los niños con cáncer.
Las piezas se llaman TOY (un caballo balancín realizado en oro rosa) y CANDY (un caramelo de amatista y oro) y el 10% de las ventas de ambas piezas se destinará a la construcción del jardín.
Así que, esta vez, en vez de mostraros lo bien que lo he pasado en la VFNO, prefiero pediros que colaboréis con una entidad tan especial y que ayudéis a que las horas de quimioterapia de los niños con cáncer se hagan más amenas, donando una videoconsola, haciendo una donación o comprando las joyas de Perodri.
Puede que lo más fácil es que cojas tu móvil y envies JUEGATERAPIA al 28011.
No cuesta nada. Hazlo.