Volver a tener buena cara después de las fiestas

Diciembre es el mes por excelencia de las mascarillas.
Aunque admito que no suelo tener mucho tiempo de aplicármelas ni de estar 10 minutos quieta, estos días de tanto desbarajuste horario, de no habernos desmaquillado como deberíamos y de algo de mala cara al despertar, las mascarillas son para mi, un buen «desayuno» para la piel.
Hoy amanecí hinchada. Es verdad que estos días la retención de líquidos de la que hablaba en el post anterior hace que me levante rara, así que corrí a buscar alguna mascarilla de esas que guardo en el cajón de «productos pendientes de probar».
Abro el cajón y veo Bio Enzymes Mask Anti-Edad, de Talika. No suena nada mal.
Mascarilla TALIKALeo que sus ingredientes principales son: colágeno (perfecto para alisar arrugas e hidratar), ácido hialurónico (que sabéis que retiene hasta 1 000 veces su peso en agua, revitaliza y alisa la piel) y sandía del desierto de Kalahari (que no conocía pero aseguran que es antioxidante y protectora).
Mientras se va haciendo el café voy poniéndola sobre la piel y ya agradezco el primer detalle: es de esas mascarillas que se adhieren bien a la piel y puedo tomarme el café con ella puesta e incluso trabajar.
Sabéis que hay algunas que se adhieren pero si haces cosas con ellas puestas, van resbalando o moviéndose un poco y no hay sensación más incómoda. Y eso de tumbarme 10 minutos sin hacer nada con la mascarilla puesta, no es para mí,… qué os voy a contar a estas alturas.
Desde el primer momento noto la piel fresca (fría incluso) y voy notando como se va descongestionando la piel. Maravillosa.
A los 20 minutos la retiro (no hay que dejarla tanto pero yo suelo hacerlo) y la retiro.
Queda poco exceso de producto (buena señal, la piel se lo ha «bebido» todo) y la piel está tersa, hidratada y jugosa.
La mascarilla se vende de forma individual por 7 euros.
Podéis leer más y comprarla en la web de la marca