Debe ser el efecto secundario más importante de ser madre. Debe ser la tortura más cruel a la que nos someten los niños desde que nacen hasta que… algún día se van de casa. Debe ser lo más difícil de superar por mucho que el imperio de Coca-Cola, Nescafé o Saimaza nos intenten echar una mano…. Estoy hablando, sí, sí, sí… de la temible, insuperable y durísima falta de sueño.
Y es que cuando te dicen en el embarazo que aproveches para dormir a pierna suelta, una mira así como si se dirigiera a un loco, diciendo «hum, sí claro!» – pensando que nuestro interlocutor exagera.
Pero no. No exagera, al contrario. Debería de aconsejarnos hibernar durante meses para coger fuerzas porque esto (no señores) no es cosa de dos días.
Cuando un bebé empieza a dormir toda la noche, una respira aliviada sin saber, que después vendrán las pesadillas, los terrores nocturnos (jamás entendí la diferencia…), las primeras noches sin pañal, las caídas de almohadas, las noches de tos,… y supongo que esto ya dura hasta que empiecen a salir por la noche y no pegues ojo preocupada por el donde, cómo y con quién estarán…
Por eso, y por las largas jornadas de trabajo que nos obligan a intentar alargar un poquito el día, robándole algunas horas a la noche, uno de los términos más buscados es «soluciones contra las ojeras o bolsas».
Y es que esa es la zona donde todo se manifiesta.
Las ojeras y las bolsas, además de hacernos parecer mayores, van anunciando a todo el mundo que, de nuevo, esta noche fue movidita. Y quitando alguna madre solidaria o papás aún sensibilizados, al resto del mundo no le importa nada de nada si tu princesita tiene tos o si el mayor tiene pesadillas, así que toca ser práctica, buscar un remedio y ahorrarse las explicaciones.
Mi último descubrimiento en este campo de las ojeras, bolsas y patas de gallo (como veréis todo lindezas…) es Nopad, otro de los muchos productos milagrosos de Matriskin.
Se trata de un botecito que contiene una crema con fosfatidicoina y que se usa solo 3 veces por semana.
Si os digo que Sara Carbonero, y muchísimos otros famosos sucumbieron hace años al «milagro desinfla-bolsas» (como algunos lo llaman) solo os estaré dando un motivo más para confiar en Nopad.
Pero también os puedo decir que a mí en un mes de aplicación (eso sí, rigurosísima, sin saltármelo ni una vez) se me han quitado prácticamente las bolsas y eso provoca que las ojeras se noten mucho menos.
Es cierto que el verano y el buen tono (que en mi caso no llega a ser ni bronceado) mejora el aspecto, pero también os digo que las noches en vela han sido muchas.
Nopad de Matriskin tiene un precio de 47,00 euros, I.V.A. incluido (21%).
Envase de 15 ml.
¿Lo conocéis? ¿Tenéis algún truco o remedio para ojeras y bolsas?