Mi opinión sobre el autobronceador St Tropez

Hace más de 4 años que gracias a Mónica Ceño y su The Lab Room descubrí los autobronceadores de St. Tropez. Eran tiempos en los que costaba encontrarlos en España y nadie imaginaba a la señorita Moss aplicándoselos.
Sin embargo, hace años que no los volvía a probar y creedme que tenía ganas de ver si, como el resto de autobronceadores (y como el buen vino), había mejorado con el tiempo.
Aunque hubiera preferido el gradual, llegó a mis manos el formato mousse y me lancé a comprobar sus bondades. Aclaro que lo probé solo en el cuerpo. Para la cara ya os conté mi descubrimiento de Clarins.
ST TROPEZ AUTOBRONCEADOR MOUSSE
¿La primera impresión? Horrible.
Se trata de  una mousse oscura. Tan oscura que te hace dudar de si el producto estará en buen estado o si te has confundido y has comprado otra cosa.

Pero pasado ese terrorífico momento, casi en un acto de fe, te comienzas a aplicar el producto.
Al ser formato mousse, se aplica y se extiende de maravilla. Tengo que reconocer que es un formato perfecto para autobronceadores (y que probablemente nunca hubiera elegido). La aplicación es suave y uniforme. Al ser tan oscuro, ver donde lo has aplicado y donde no.
KATE MOSS ST TROPEZ
Después de aplicar por cada zona (piernas, brazos, escote) tus manos están tan negras que yo opto por lavármelas bien,  a ser posible con un jabón exfoliante, como el de Biotherm, aunque después vaya a seguir aplicándolo, porque de verdad, que el color es tan oscuro que da miedo que se queden teñidas…
Yo me suelo aplicar autobronceadores una tarde que vaya a estar en casa. El motivo es que prefiero no arriesgar a manchar ropa, y porque el olor (por suave que sea) no me acaba de gustar.
KATE MOSS ST TROPEZ
Mi opinión:
* La aplicación, como os digo, bastante fácil y cómoda
* No mancha la ropa, aunque tampoco os confiéis.
* Es difícil dejarse manchas o churretes con este formato
* El color que deja AB·SO·LU·TA·MEN·TE espectacular. Es precioso y muy natural.
Como os digo es difícil dejar manchas porque se aplica bastante bien, pero yo me dejé deliberadamente un pegote en la espalda para ver qué pasaba, y eso sí, la mancha es tan oscura que queda feísima. Pero si lo extendéis más o menos bien es raro que os quede ninguna.
* Cuando te metes en la ducha (en mi caso a la mañana siguiente) notas que parte del producto se va. Es un poco raro, es como si destiñeras…
Pero el color se mantiene y lo que más me gusta es que no es anaranjado, es más bien dorado.
* El color se mantiene bastante tiempo, unos 4ó 5 días.
 
El precio es un poquito más alto que otros, unos 39 euros y ya se venden en El Corte Inglés.